martes, 14 de mayo de 2013

¿Será que si existe el príncipe azul?

Me ha costado entender que hoy en día las relaciones son muy desechables.  Es decir, el hombre y la mujer se unen, comparten sentimientos, emociones y estados económicos de forma instantánea pero con el pasar del tiempo este compartir se deteriora rápidamente y sin mucho esfuerzo y lucha se decide terminar.
 
Anteriormente las relaciones eran más duraderas, ejemplo claro nuestros abuelos quienes luchaban por perdurar la unidad familiar y que los hijos vieran en ellos un ejemplo de hogar.  Yo personalmente, como mujer moderna pero con algunos pensamientos clásicos todavía, aún sueño con tener mi príncipe azul.  Esa persona que es tu media naranja, con la cual complementas tu forma de ser y puedes compartir sueños, metas y experiencias. 
 
Una amiga me decía (pensamiento como producto de su primer fracaso matrimonial), que los príncipes azules ya no existen y que sólo cuando tengas un hijo varón podrás entender el verdadero significado de un príncipe azul.  Que no hay amor más sincero entre un hombre y una mujer que el que le da una madre a su hijo, y que el amor de marido y mujer, muchas veces resulta ser pasajero.
 
Con todo y este pensamiento, quedo totalmente confundida y me pregunto ¿Será que si existe el príncipe azul? o sólo es ciencia ficción? o hace parte de mi imaginación de un cuento de hadas que nunca será realidad?
 
Lo que si es cierto, es que en cada relación (aunque muchos contradigan en este pensamiento) se debe dar lo mejor de sí para aprovecharla al máximo, y poder tener la satisfacción propia de que se entregó todo como una princesa enamorada de su príncipe azul.

Entre dos mundos

Hoy en día las personas viven entre dos mundos: el mundo real y el mundo virtual.  El mundo real son todas las personas, cosas y medio ambiente que puedes palpar directamente con tus sentidos: tacto, vista, olfato y gusto.  Y el mundo virtual son todas las personas y medio ambiente que entra en contacto contigo a través de los aparatos electrónicos: computador, ipad, celulares, etc.

Sin embargo, lo más importante no es reconocer que existen dos mundos diferentes pero complementarios, sino saber vivir cuando toca vivirlos; sin olvidar que deberá prevalecer el mundo real más que el mundo virtual.

Realmente me sorprende conocer a personas que se encierran en su mundo virtual y dejan de vivir cosas reales, pasando los días y olvidándose de que hay que aprovechar al máximo de la compañía de las personas que tienes al lado, del sonido del canto de un pájaro o del olor de una hermosa flor.  Personas que se aferran a compartir espacios, conversaciones y tiempos en un mundo que muy probablemente no es real.

Sin embargo, es más sorprendente aún  cuando en actos reales, las personas se aislan e incursionan en su mundo virtual, por lo que una reunión de amigos, termina siendo una reunión de personas en cuerpo presente pero con mentes y concentración en otros espacios.

Si bien es cierto que el facebook y las redes sociales han ayudado a acercar personas lejanas, también ha separado personas cercanas.  Entre cielo y tierra no hay nada oculto y el facebook es un medio que ayuda a descubrir cosas; de hecho cuántas personas no han terminado su relación por mensajes, escritos o fotos publicadas en este medio. Ni de que hablar de personas que sostienen relaciones a distancia a través de las redes sociales, manteniendo una en su vida real; utilizando máscaras y mentiras frente a las dos personas pasando desapercibido.

Pero, con relación a éste último tema, muchas personas se preguntan ¿qué tanta infidelidad puede resultar sostener una relación en el mundo virtual sin contacto físico presencial? teniendo en cuenta que el término infidelidad (en términos legales) hace alusión al contacto físico carnal entre las personas involucradas.  Por lo que relaciones virtuales bajo esta definición no estaría incluído como infidelidad.
 
Por otro lado el concepto católico considera pecado la obra, pensamiento, palabra u omisión indebida  que van en contra de la pareja; por lo que bajo esta premisa si se considera infidelidad las relaciones virtuales. 
 
Infidelidad o no, pecado o no, lo que si es cierto es que con el avance tecnológico nos hemos sumergido a vivir entre dos mundos y que sólo sales o entras en ellos dependiendo de tus intereses personales.

lunes, 13 de mayo de 2013

... La Hamaca...

La hamaca es un utensilio utilizado para descansar o dormir, elaborado con telar o fique. Pero para mí éste no es un utensilio cualquiera, te permite relajarte, soñar y transportarte.  De hecho si la hamaca hablara... contaría tantas historias y viajes realizados, escenas de amor y de desamor a orillas de la playa, de un lago y hasta del mismo cuarto.  

Nuestros antepasados nativos, utilizaban este utensilio para dormir solos o acompañados y veían en ella el lugar perfecto para mirar al cielo, cerrar sus ojos y reencontrarse con ellos mismos.